Cera de Abejas: La cera de abejas se utiliza en cosmética debido a sus propiedades bacteriostáticas, emolientes, antiinflamatorias y cicatrizantes. Actúa como emoliente (propiedad de ablandar durezas). Su uso como jabón de limpieza ablanda la capa córnea, arrastrando células muertas e impurezas.
Miel: Por su riqueza en azúcar, la miel está dotada de virtudes higroscópicas: fija las moléculas de agua, por lo que favorece la hidratación de la piel. La miel más activa en cosmética es la líquida y equilibrada, especialmente la de acacia. Dadas sus virtudes anti-irritación, todo producto de belleza con miel resulta perfecto para pieles sensibles. Su olor agradable y delicado acrecienta el placer de su utilización como jabón.
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